sábado, agosto 20, 2005


JARDIN
Siempre es agradable estar en el CENART. Su arquitectura vanguardista y áreas verdes lo convierten en un oasis dentro de la ciudad. Así que cuando Paulo y yo lo visitamos para ver los trabajos de los becados en su bienal, aprovechamos para caminar entre los edificios y tomar fotos de manera clandestina.
Estudiantes y gatos, sí gatos, son los dueños del sitio. Quien sabe, igual y todo artista lleva un gato en su interior.

1 comentario:

Gina dijo...

te hago un comentario medio tonto.. tal vez los gatos son al CENART lo que los cuervos a la London Tower.. dice la leyenda que si se van, se acaba la monarquía. Si los gatos se fueran.. que se acaba? LA CORRUPCION? JAJAJA